Me tocó este libro en el sorteo que organizó Laky para el mes de la novela familiar y ahora que lo he leído estoy más convencida de que tuve mucha suerte.
Esta novela se sitúa en un pueblecito de Inglaterra en los años 60. Liv llega allí con su madre tras haber sido abandonadas por su padre y en seguida entabla amistad con Rachel, y, a través de esta, con Katherine.
Liv es una chica romántica y soñadora que no pierde la esperanza de que su padre vuelva algún día. Cree en el amor por encima de todo.
Rachel es la hija perfecta de un matrimonio acomodado. Lo tiene todo, es guapa, simpática, gusta a todo el mundo en el primer momento.
Katherine es la más independiente e inconformista, tiene bastante tendencia a querer lo que tienen los demás y a veces parece tener envidia de Rachel.
Estas tres jóvenes de carácter tan diferente son las protagonistas del libro, y vamos viendo su paso de la infancia a la adolescencia y finalmente a la vida adulta. Cuando alcanzan la mayoría de edad los caminos de las tres chicas se separan y se distancian, cada una centrada en sus respectivas vidas. Sin embargo, Katherine y Liv reciben un día una llamada de Rachel contándoles que ha ocurrido algo horrible, aunque no les dice de qué se trata.
Esto cambia la perspectiva y prioridades de las jóvenes.
Como os decía al principio, tuve la gran suerte de ganar este libro, y es que me ha gustado mucho.
Me metí en la historia prácticamente desde el primer momento (esto no me pasa a menudo) y me retuvo hasta el final.
Los personajes están estupendamente perfilados, tanto las protagonistas como los secundarios. Somos conscientes en todo momento de sus preocupaciones, sus alegrías, sus preferencias, sus miedos, sus angustias. No solo conscientes, en mi caso, prácticamente los he vivido con ellas.
La época en la que transcurre la historia también está bien reflejada, sobre todo a través de uno de los personajes secundarios vemos cuál era la situación económica y política del país en aquellos años.
En el libro se tratan temas duros, muy duros, como la muerte, el maltrato, la violación, pero también otros bonitos como la amistad, la confianza, la superación o el amor. Además, gracias especialmente a Katherine, que decide irse a vivir a Londres y vemos un ejemplo de una mujer trabajadora de éxito de esa época. Por su parte Liv es un claro ejemplo de superación y de mujer que hace lo que sea por su familia y por sacarla adelante y protegerla.
La narración es amena y, al ir saltando de un personaje a otro, engancha y no puedes soltarlo.
Ha habido momentos en los que la inquietud por lo que podía pasar ha impedido que soltara el libro durante varias páginas.
Lo que no termina de convencerme es que se catalogue como saga familiar, ya que, aunque cumple con que conozcamos a varias generaciones cada familia, para mí la trama "de saga familiar" ha quedado un poco de lado en comparación con las vivencias de las protagonistas. Diría que se trata de un libro de mujeres que luchan por hacerse un hueco en el mundo y salir adelante.
En conclusión, el libro me ha gustado más de lo esperado, ha habido momentos que me ha mantenido en vilo y lo he disfrutado mucho.
Mi puntuación para este libro: 8/10