sábado, 22 de noviembre de 2014

Diciembre: mes de la novela clásica

Falta poco para entrar en el último mes de este año y el blog Libros que hay que leer ha convocado para diciembre el mes de la novela clásica, pudiendo participar leyendo y reseñando libros de antes de 1900. Como últimamente me ha dado por leer libros de este tipo, que me están encantando, y espero seguir haciéndolo, me apunto a la iniciativa.



Además, para animarnos a participar, Laky sortea un ejemplar de Evelina. Yo no participo en el sorteo porque ya lo tengo, pero si no sería difícil resistirme. Para participar en el sorteo hay que inscribirse antes del martes25 de noviembre a las 19.00 horas.


¿Os gustan los clásicos? Yo ahora estoy con Cranford, de Elizabeth Gaskell y ¡no quiero que se termine!

jueves, 20 de noviembre de 2014

En el piso de abajo, Margaret Powell

Hoy vengo a contaros mis impresiones sobre las estupendas memorias de Margaret Powell, una cocinera a principios del siglo XX. Pero antes quiero pedir disculpas por actualizar tan poco el blog y pasar poco por los vuestros, el trabajo y las clases absorben prácticamente todo mi tiempo y me temo que, o me organizo mejor o esto seguirá así hasta junio. Dicho esto, vamos con el libro de hoy.

En el piso de abajo narra la historia de Margaret Powell, una chica de una familia numerosa y humilde que empieza a trabajar siendo muy joven. No es que quisiera hacerlo, ya que a ella le habría gustado continuar estudiando para ser maestra, pero debido a la necesidad de su casa, no tuvo elección. Tras pasar por algún otro trabajo, no tarda en comenzar a trabajar en el servicio doméstico como ayudante de cocina. El sueldo no era alto, pero al menos allí la comida estaba incluida. Después de pasar un tiempo en esta posición, y siendo aún muy joven, decide aventurarse a buscar un puesto de cocinera, un empleo que al principio le viene un poco grande pero al que logra hacerse echando mano del ingenio y de la paciencia.


Hacía tiempo que tenía este libro pero no me animaba a comenzarlo por temor a que pudiera resultar algo aburrido. Tras leerlo me doy cuenta de lo equivocada que estaba. La historia está narrada de manera muy ágil, el primera persona, y sin extenderse demasiado en detalles. Aún así, nos hacemos perfectamente a la idea de cómo debían de ser las casas en las que trabajó Margaret, así como sus empleadores y compañeros.

Me ha gustado especialmente que gracias a este libro conocemos cómo se trabajaba en las casas de principios del siglo pasado. Y es que no todas las casas que tenían servicio doméstico eran como Downton Abbey, también las había muchísimo más modestas. Y es precisamente esta una de las cosas que más me llaman la atención. Cómo una familia de cierta clase, a pesar de estar prácticamente arruinada no podía prescindir del servicio doméstico, y es que había que mantener la reputación. Margaret Powell nos narra perfectamente los malabares que tenían que hacer para estirar el dinero en algunas casas, lo que incluía la comida. 



También nos cuenta otras curiosidades como cuando pidió a una de sus señoras, una que tenía bastante consideración con el servicio, si podía tomar prestado uno de sus libros. Esta le dijo que sí, pero francamente sorprendida porque a la cocinera pudieran interesarle los libros. Otros de sus empleadores marcaban mucho más las distancias, como si el servicio fuera de otra especie.

Me ha gustado también que la autora no nos hace creer que no se habría cambiado por estar en el lugar de sus señoras por estar orgullosa de su procedencia y su trabajo. Margaret en todo momento expresa su deseo de encontrar un marido que no trabaje en el servicio doméstico para poder tener otro tipo de vida. 

Todo esto nos lo cuenta la autora con una gran ironía, sinceridad y gracia que hace que el ritmo no decaiga y el libro no sea pesado en absoluto, más bien lo contrario.

En definitiva, un libro perfecto para saber un poco más sobre la diferencia de clases en los años 20 y sobre cómo era la vida en el piso de abajo, el de la cocina y el servicio doméstico. Muy recomendable, y más si os gustan Downton Abbey, Arriba y abajo...

Mi puntuación para este libro: 8/10

Foto de la cocina: http://www.dailymail.co.uk/femail/article-2384753/Now-create-servants-quarters-Downton-Abbey-paint-goes-sale.html 

miércoles, 5 de noviembre de 2014

Muchachas, Katherine Pancol

Hace unos años leí Los ojos amarillos de los cocodrilos, de la misma autora del libro que traigo hoy y, aunque no seguí leyendo la trilogía, me quedó el recuerdo de haberlo disfrutado bastante. Por ello, al ver que se organizaba una lectura conjunta para leer el primer libro de su nueva trilogía me llamó la atención y decidí probar.

Sinopsis de la editorial:

Esta novela está llena de chicas. Ellas llevan la batuta. De Nueva York a París, de la Borgoña a Londres o a Miami. Chicas que inventan, se encienden, aman. ¿Y los hombres? Ellos también están. Pero son las muchachas las que bailan, bailan, bailan. Ellas hacen volar su destino esplendoroso. ¡Y esto solo acaba de empezar!

Al comenzar a leer el libro me sorprendió bastante encontrarme con una de las protagonistas de Los ojos amarillos de los cocodrilos, no sabía que este fuera una continuación de aquellos libros y me faltaban dos por leer para saber qué había sido de sus protagonistas. Ahora la hija mayor vive en Nueva York tratando de hacerse un hueco en la industria de la moda. Al parecer, sigue siendo la misma chica caprichosa y egoísta que conocimos, así que no debe de haber cambiado mucho.

Pero, al terminar el primer capítulo, segunda sorpresa. Otra historia y otros personajes. A estos no los conozco. ¿Aparecerían en los siguientes libros? (me pregunto). Parece que no, que esta historia comienza aquí. Así conocemos a Stella, una mujer luchadora y fuerte que fue maltratada por su padre y a la que ahora, ya de adulta, le sigue tocando luchar para llevar una vida llevadera para ella y para su hijo en el pueblo, un pueblo que mira para otro lado y finge no conocer la maldad de su padre.

En medio de esta historia nos encontramos con un capítulo sobre Josephine, la madre de Hortense. El capítulo nos desvela hechos importantes que ocurrieron en las dos dos últimas novelas de la trilogía anterior, lo que no me gustó, ya que no tenía descartado leerlos y ahora sé cosas relevantes que ocurren en las mismas. 

Tras este capítulo sobre Josephine, volvemos a la vida de Stella. 

Para mí, esta novela se divide en dos historias, la de Hortense y Josephine (que para mí van juntas porque así las conocí), y la de Stella. 

Si bien Los ojos amarillos de los cocodrilos me gustó bastante y me gustaría continuar la trilogía, no me ha convencido la manera de encontrarme con sus personajes de nuevo, por una parte porque se me han desvelado hechos que ocurren en los libros que aún no he leído y por otra porque estas partes me han parecido más flojas que la de Stella. Es como si nos hubiera presentado a los personajes, cómo se encuentran, pero sin desarrollar su historia, imagino que esto vendrá en las siguientes entregas.

En cuanto a la historia de Stella, me ha parecido suficiente para un libro muy completo. Aunque al principio no sabemos nada de ella, intuimos que hay algo que la atormenta y a lo que tiene miedo, sin embargo, también vemos que es una mujer fuerte. Tiene un hijo al que protege muchísimo, pero no sabemos de qué.

Después conocemos la infancia de Stella y la historia del maltrato por parte de su padre, e incluso nos remontamos más atrás en el tiempo. No quiero extenderme más para no destripar algo importante.

Esta parte del libro me ha mantenido en vilo, preguntándome por qué actuarían así los personajes, qué habría pasado antes y qué vendría después.

El tema que trata es duro y la verdad es que no esperaba encontrarme algo así en este libro, pero, al final, ha resultado una sorpresa agradable.

En conclusión, a mí me habría bastado con la historia de Stella para tener un libro bastante redondo. Imagino que el introducir la otra historia se verá en los siguientes libros de la trilogía, pero me parece que para los que no han leído los anteriores libros de la autora puede resultar confuso

Me quedo con muchas ganas de saber cómo continúa la historia de Stella y con la curiosidad de qué papel tendrá cada historia en los próximos libros, así que no sé si los leeré o preguntaré mis inquietudes a alguien que lo haga.

Mi puntuación para este libro: 6/10